La última tecnología ¿a qué precio?
El mundo globalizado tal y como lo concebimos hoy nos deslumbra con los beneficios de contar con la última tecnología. Este mundo industrial, nos impulsa, nos motiva y nos vuelve dependientes de cada avance tecnológico e informático ya que éstos influyen en nuestra calidad de vida y nuestro estándar laboral, pues es conocido que "a mayor rendimiento, mejores beneficios económicos" . Aunque no se pueden desconocer los impactos positivos de la nueva era informática, tampoco puede perderse de vista la responsabilidad ecológica que implica esta rueda de reemplazo constante de productos al medio ambiente, responsabilidad que sólo asumen algunas empresas que trabajan por mantener una imagen limpia y ética de su industria.
Pero, el verdadero problema se presenta cuando empresas y personas no asumen la responsabilidad de su revolución informática y transfieren a la sociedad y al ecosistema los costos de su evolución.
El reciclaje de equipos de computo como proyecto social nos da una nueva oportunidad no solo de reducir los residuos electrónicos , si no de poder conectar proyectos educativos a través de las tecnologías de la información
El reciclaje de tecnología tiene que ir mas allá la obsolescencia programada nos pone en una encrucijada e ir conta corriente es un norte que suena extraño pero el intento de no solo colaborar con el medio ambiente que suena ya a frase de cajón si no también darle un sentido educativo a este reciclaje, nos hace poner un grano de arena en este mar de basura tecnológica con un carácter social